jueves, 3 de marzo de 2011

El nombre es lo de menos




Hoy hemos sufrido uno de esos contratiempos que hacen tan amigables a las compañías aéreas. El nombre de la compañía es lo de menos, no queremos señalar a nadie.

El vuelo era a las 06:50, Madrid-Amsterdam. Habíamos concertado una cita para conocer las instalaciones que la empresa XPLANE tiene en Europa. Además íbamos a participar en una sesión de Visual Thinking desde las 16:00 hasta las 18:30. Llevábamos un poco de lomo ibérico para el vino de después en sus oficinas. O sea, un buen plan.

Pues el avión encara la pista de despegue y a la mitad pega un frenazo dejándonos helados a todo el pasaje. Después de recuperarnos del susto nos dicen que ya nos aclararán el motivo, pero que tenemos que volver. El avión pasa 20 minutos circulando por Barajas, de T en T. Al llegar de nuevo a la T1 vienen los ingenieros y nos comunican que el avión está roto. Nos advierten que esa compañía no tenía aviones libres en Madrid, pero que nos traen uno desde Londres ... "nueva hora estimada de salida, las 15:30h.". Nadie dió más información. Las personas que nos atendieron eran de otra compañía aérea que, de vez en cuando, atienden a clientes de esta compañía de la que no queremos dar el nombre.

Conclusión: Adiós al plan.

Este blog va de creatividad de modo que nos hemos hecho una pregunta al hilo de lo que nos interesa:

"¿no es posible hacerlo de otro modo?"

Y este es el resultado de nuestra tormenta de ideas:

1. Contar la verdad
2. Explicar los derechos que le asisten al pasajero
3. Proponer varios planes para que la gente ocupe el tiempo hasta la salida del nuevo vuelo
4. Pedir disculpas hasta que resulten pesados
5. Regalarte un billete para otro destino
6. En el nuevo vuelo darte comida y periódico gratis
7. Mandarte un mail tras otro informándote de cómo va el avión que viene desde Londres
8. Lo mismo pero con SMS
9. Mandarte un mail contándote con pelos y señales el fallo mecánico
10. Subrayar que esta empresa (no queremos dar nombres) no vuela si sus aviones no están PERFECTOS

¿Adivináis cuántas de estas ideas se han llevado a la práctica?

Pues no, no habéis acertado. No han llevado a la práctica ninguna de ellas. Ni una sola. Cero.

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